El viaje comienza por la tarde/noche, en el punto de embarque seleccionado: Córdoba, Santa Fe, Paraná u otras ciudades según tu salida.
Al subir, el coordinador recibe al grupo, marca asistencia, ayuda a acomodar equipaje y explica las paradas programadas.
El bus arranca su recorrido hacia Brasil, cruzando la frontera durante la madrugada.
En ruta hay varias instancias para estirar las piernas, comprar algo caliente, ir al baño y descansar.
La noche a bordo es parte de la experiencia: cortinitas cerradas, aire fresco, música suave y el clásico silencio general. Muchos aprovechan para dormir, leer, mirar series o charlar mientras la ruta va cambiando de paisaje.
Ya por la mañana, la luz del sol brasilero aparece entre los morros. El bus realiza la última parada y desciende directo hacia Balneário Camboriú.
Al llegar, cada pasajero baja en su hotel asignado:
Hotel Sagres · Hotel Ilha da Madeira · Hotel Dos Açores, según la categoría que eligieron.
Check-in asistido por el coordinador.
Tiempo libre para ducharse, descansar un poco y salir a reconocer la zona:
A la tarde: playa ligera, caminar por la costanera o simplemente relajarse y sacarse el “modo bus”.
Por la noche, cena incluida en el hotel o restaurante asignado.
Día suave para no sobrecargar después de la ruta.
Primer día completo en Camboriú.
El coordinador suele recomendar arrancar por Praia Central, amplia, accesible y perfecta para aclimatarse.
La playa tiene:
Por la tarde, caminata hacia el Pontal Norte, un paseo costero con plataformas de madera, miradores y el icónico muelle desde donde se ve toda la bahía.
Es ideal para sacar fotos y aprovechar los rayos dorados del atardecer que le dan a Camboriú su look cinematográfico.
Día recomendado para hacer la excursión más famosa de la ciudad.
Arranca en Barra Sul, con la subida al teleférico.
Desde arriba, Camboriú se ve completo: edificios, bahía, morros y mar abierto.
El parque permite:
Después de eso, se baja a Praia de Laranjeiras, una de las playas más tranquilas y hermosas de toda la región.
Mar calmo, agua verde, restaurantes sobre la arena y una vibra muy familiar.
Regreso en teleférico o en barco-taxi (opcional).
Para este día, los viajeros que quieren algo más natural y diferente van a Praia do Buraco.
Se accede por el “Deck do Pontal”, un recorrido espectacular entre morros y mar, totalmente fotogénico.
Praia do Buraco es más tranquila, ideal para quienes buscan:
Después de mediodía, volvés a la zona central y queda la tarde libre para relajarse o recorrer comercios y cafeterías.
Por la noche, cena incluida.
Mañana libre para hacer compras.
Lugares recomendados:
La tarde se puede usar para playa suave o simplemente descansar.
Los que prefieren excursiones opcionales pueden elegir:
Cena incluida por la noche.
Último día completo para elegir tu playa favorita o repetir la salida que más te gustó.
Opciones:
Por la noche, última cena incluida y caminata por la Av. Brasil, ideal para comprar regalos, tomar un açaí o cerrar el viaje con un toque local.
Check-out temprano.
El bus pasa por cada hotel, recoge a todos los pasajeros y comienza el retorno.
Cruce de frontera, paradas reglamentarias, y otra noche en ruta.
Momento de descansar, ver fotos del viaje y charlar de la experiencia.
Al día siguiente, llegada a la ciudad de origen.
Fin del viaje.
